La señora Mariela y su hijo
Carlos Alberto, desplazados de Trujillo valle por amenazas, y luego de perder a su esposo y padre respectivamente
por grupos al margen de la ley, llegan a la ciudad de Armenia a casa de un
familiar. Para ese entonces Carlos tenía
5 años, Hoy han pasado veinte dos años y llama la atención su tesón y
deseos de superación a pesar de todo lo vivido hace dos décadas atrás.
La señora Mariela trabaja como
cocinera en uno de los parques de recreación de la ciudad, mientras trabaja
fuertemente su hijo le ayuda con algunas funciones como a barrer, a lavar loza,
como el mismo lo cuenta con orgullo.
Claro está, que la mayor parte del tiempo la dedica a estudiar, pues acaba de
recibir su diploma de grado noveno, con mención de honor por haber obtenido el
primer puesto gracias a su rendimiento académico y excelente disciplina.
Ejemplo que siguió de su madre, ya que hace dos años ella se graduó de
bachiller en la misma institución educativa.
Carlos es Autista. Pero esto no
impide que sea un joven con capacidades y destrezas, que marquen la diferencia.
Su educación, las buenas costumbres, la forma de relacionarse con los demás, además de su inteligencia
matemática, hacen de él una persona excepcional. Dice que quiere estudiar sistemas, luego de
graduarse de bachiller como su mama.
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